INDOLENTES
Ayer, 26 de abril, Guaymas vivó una crisis de inseguridad como en otras ocasiones. Tal vez esta mas por el «levantado» por un comando armado, que resultó ser hijo de un alto militar de la marina. Por eso se desarrolló un operativo militar por toda la ciudad. Se activó el famoso Código rojo, por mas de ocho horas.
Horas de tensión que se vivió en Guaymas por los ciudadanos, que se veía de todo tipo de autos de seguridad, ulular de sirenas, helicópteros sobrevolando la ciudad, ambulancias y otras cosas de ese tipo.
Por la tarde-noche, surgió en las redes sociales y en páginas dedicadas mas a la nota policíaca, que la policía municipal había recibido amenazas por la radio frecuencia que iban a tener represalias por los sucesos de esa tarde. Se reforzó la seguridad del Comisario de Seguridad Pública de la corporación policíaca municipal y siguió la tensión en la ciudad.
Mientras esto pasaba, la alcaldesa y algunos funcionarios en parranda corrida en su casa, celebrando un cumpleaños, con una actitud indolente a prueba de balas. A ella no le importa Código rojos, amenazas a su corporación, ni «levantados» ni muertos, ni balaceras, ni persecuciones, ni mucho menos las tensión que viven los ciudadanos de Guaymas. Ella en su pachangas. Tomando fotos y selfies.
Con todo descaro y sin pudor alguno. la fiesta de anoche con sus funcionarios, se dio por fuera de su domicilio, frente a la calle, donde todos los que por ahí pasaron se dieron cuenta. Eso es ser indolente.
Con un gobierno de victorias pirricas y una mayoría en cabildo cometiendo torpeza tras torpeza, están agazapados, porque no saben que hacer. Sin proyecto. Sin rumbo. Haciendo de su victoria un hecho vergonzante. En esta ciudad agotada por las matanzas , no se siente recomposición y perspectiva, sino tensión y desasosiego