SIN PRECEDENTES
Elegimos nuestro arrepentimiento. No se eligió a un gobierno diferente. Ni a una alcaldesa diferente. Elegimos una locura.
Vivimos los tiempos en el cual las criticas al gobierno municipal son usadas como escudo para no responder cínicamente. Es el tiempo de las discusiones miserables, donde los enfrentamientos están a la orden del día, Gravísimo y sin que haya reclamos de fondo, se han dicho y hecho sentencias y amenazas de todo tipo. Todos defendiendo su «posición». Unos por la injusticia y otros rezando con la Biblia en la mano.
No será la justicia la que se imponga, sino el resentimiento en medio de oraciones de amor y perdón. Pero todo esto solo esta conduciendo a la mediocridad y al fanatismo, donde corrupción y justificación del incumplimiento van de la mano. Las expectativas de cambio se redujo como la espuma y hoy vivimos un resentimiento que no conducirá a nada bueno ni nuevo, sino a la impunidad, a los nuevos rufianes e incondicionales.
Guaymas no es buena noticia ni en el Estado, ni en el país, porque los gobernantes están demostrando lo que son. con las peores actitudes y posiciones, con funcionarios demagógicos, soberbios, corruptos, entreguistas, mentirosos, que odian los cuestionamientos, repudian la critica y a sus críticos, manipuladores, represores de la disidencia, ciegos y cortesanos. Nada que ver con la construcción de una ciudad que necesita unificarse y buscar caminos distintos, auténticos y propios frente a sus graves problemas, la necesidad de certezas y un claro futuro
Nada de eso se ve tras lo que hemos visto y oído en este gobierno morenista que encabeza Sara Valle que, desde el cinismo, la mediocridad y la opacidad intelectual no tiene precedentes en el Guaymas de hoy.