SARA VALLE: EL GRAN FRAUDE
El primero de julio del 2018 se detuvo todo, como fuerza de cambio. Se pensó y se creyó que sin el PRI y sin el PAN en el gobierno todo cambiaría, contra toda razón se regresó al pasado. Pero no a un pasado reciente, sino a un pasado que desde hace muchos años no veíamos. Y nos referimos a la forma de gobernar
Mentiras, corrupción, engaños, enconos, enfrentamientos políticos, impunidad, nepotismo, ilegalidades, entre otras cosas, han sido una constante en el gobierno que encabeza Sara Valle Dessens, alcaldesa del municipio de Guaymas. Se suponía que el 1 de julio marcaría un hito y se resolvería en los hechos un largo debate sobre la lucha por la democracia y la igualdad social. Y no fue así. El cambio no ayudó a ampliar el pensamiento democrático y tampoco fueron una alternativa electoral. Resultaron un verdadero fraude
Sin el PRI ni el PAN en el gobierno municipal de Guaymas, se ha entrado a una de las noches mas oscuras de la ciudad, pues en lugar de defender derechos ciudadanos, se han querido ostentar como caudillos. Han retrocedido en calidad política, conceptual y programática. Se abandonó la formación de cuadros analíticos y desapareció el método de la autocrítica. Ahora ya no hay militantes, fueron sustituidos por operadores. Ahora ya no hay debate, hay encuesta.
Hoy el gobierno de Sara Valle, se ha convertido en un gobierno clientelar. Promotor de grupos priistas de choque, triados de algunas colonias para «blindarse» de los incómodos que la critican. Sus propuestas de campañas se han convertido en un listado de ocurrencias individuales y desarticuladas, impuestas sin debate ni argumentos. Hoy, la alcaldesa Sara Valle exige disciplina y obediencias y toda critica debe ser acosada, descalificada, acusada de traición. Sara Valle y su proyecto de gobierno es como un viejo tronco seco, tirado y sin raíces
Para Sara Valle su historia no tiene raíces, lo del periodo 97-99 es algo horrible que pasó en su vida y no quiere saber mas de el, por eso tiene la idea de que todo aquel que lo apoya es su aliado, el que no es un traidor. Para la alcaldesa, todo aquel que se le subordina es su aliado. Tiene una abierta lucha a favor de la ilegalidad. Y ese vació conceptual la ha llevado al pragmatismo en sus formas de gobernar porque su crisis del pensamiento democrático le ha debilitado la fuerza de las ideas y de programa. La falta de legalidad y democracia ha hecho un escaparate de su ineficiencia y su incapacidad para dirigir y controlar un gobierno., como así se ve y se nota en cada sesión de cabildo, púes la manera de fustigar a sus críticos la convierte en una verdadera y autentica déspota.